La historia de Rosa y el jardín de la comunidad

Eduardo Arredondo
2 min readJul 8, 2024

Rosa era una mujer jubilada que vivía en un pequeño pueblo rodeado de montañas y ríos. Su vida era tranquila y rutinaria, dedicada a cuidar su jardín y leer libros de poesía. Sin embargo, Rosa sentía que algo faltaba en su vida, algo que le diera un nuevo sentido a sus días.

Un día, mientras caminaba por el parque central del pueblo, Rosa notó que el jardín comunitario estaba descuidado y abandonado. Las flores se marchitaban y las bancas estaban cubiertas de polvo. Fue entonces cuando tuvo una idea: ¿por qué no revitalizar ese espacio y convertirlo en un lugar de encuentro para todos?

Con entusiasmo, Rosa se puso en contacto con sus vecinos y propuso su proyecto. Al principio, algunos dudaron, pero la pasión y la visión de Rosa los convencieron. Juntos, comenzaron a trabajar en el jardín, plantando nuevas flores, pintando las bancas y arreglando los senderos.

El jardín comenzó a transformarse y, con él, la comunidad. Personas de todas las edades se unían para cuidar las plantas, compartir historias y disfrutar de la belleza del lugar. El jardín de la comunidad se convirtió en un símbolo de unión y esperanza.

La historia de Rosa nos enseña que nunca es demasiado tarde para iniciar un cambio positivo. Nos muestra que una sola persona con una idea y determinación puede inspirar a toda una…

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